El Valle de Aosta regala este año el árbol de Navidad del Vaticano

El Papa ha transcurrido en esa región las vacaciones veraniegas en siete ocasiones

Share this Entry

CIUDAD DEL VATICANO, 17 diciembre 2003 (ZENIT.org).- En atardecer de este miércoles se iluminó el monumental árbol que en estas Navidades ha sido colocado en la plaza de San Pedro del Vaticano, regalo del Valle de Aosta.

El abeto de casi 30 metros de alto y 110 años es un gesto de agradecimiento de esta región autónoma italiana que ha acogido a Juan Pablo II durante siete veranos en sus vacaciones.

Además, el Valle de Aosta ha reglado al Santo Padre más de veinte árboles que adornarán en estas Navidades diferentes rincones del Vaticano.

La Sala Pablo VI, en la que tuvo lugar la audiencia general del Papa este miércoles, estaba adornada con uno de esos árboles y con un Nacimiento de figuras de madera procedentes de esa misma región nórdica.

Trescientos ciudadanos del Valle de Aosta hicieron entrega de su regalo al Papa, acompañados por el presidente de la región, Carlo Perrin, y por su obispo, monseñor Giuseppe Anfossi.

«Estoy muy agradecido a cuantos han hecho posible este regalo navideño que recordará a los visitantes y peregrinos el nacimiento de Jesús, luz del mundo», reconoció el Santo Padre al final de la audiencia al saludar a sus huéspedes.

Más tarde, cuando se ponía el sol en una jornada que había sido particularmente fría, el cardenal estadounidense Edmund Casimir Szoka, presidente de la Gobernación de la Ciudad del Vaticano, presidió la ceremonia de iluminación del árbol.

En el acto intervinieron el grupo folclórico «Comité des traditions valdôtaines», y los coros «Les notes fleuries» y el de la «Comunidad Montañera Gran Paradis».

Share this Entry

ZENIT Staff

Apoye a ZENIT

Si este artículo le ha gustado puede apoyar a ZENIT con una donación

@media only screen and (max-width: 600px) { .printfriendly { display: none !important; } }