BALTIMORE, jueves 18 de noviembre de 2010 (ZENIT.org).- La Conferencia Episcopal de Estados Unidos ha aprobado un acuerdo en el que reconoce como válido el bautismo de cuatro comunidades cristianas reformadas.
La Conferencia votó el pasado martes el Common Agreement on Mutual Recognition of Baptism (Acuerdo Común de Reconocimiento Mutuo del Bautismo), durante la celebración de la Asamblea Plenaria que está teniendo lugar estos días en Baltimore (Maryland).
El acuerdo ha sido resultado de seis años de estudio y debates entre los representantes de la Conferencia Episcopal estadounidense, la Iglesia Presbiteriana de EE.UU., la Iglesia Reformada de América, la Iglesia Reformada Cristiana y la Iglesia Unida de Cristo.
Monseñor Wilton Gregory, arzobispo de Atlanta y presidente del USCCB Committee for Ecumenical and Interreligious Affairs, afirmó el martes en un comunicado que esta votación supone “un hito en el viaje ecuménico”.
“Junto con nuestros hermanos y hermanas de la Reforma” de estas cuatro Iglesias, afirmó, “nosostros los obispos católicos podemos afirmar una vez más que el bautismo es la basr de la real, aunque incompleta, unidad que tenemos en Cristo».
«Nuestra Conferencia espera ahora a que los cuatro organismos competentes de las comunidades reformadas aprueben el acuerdo común que hemos realizado hoy», dijo el arzobispo.
El prelado explicó que, una vez que sea aprobado por las otras cuatro denominaciones, el acuerdo “permitirá a los ministros católicos presuponer que el bautismo realizado en estas comunidades es ‘verdadero bautismo’ como se entiende en la doctrina y en la ley católicas”.
Comunión
«La presentación de un certificado de bautismo por parte de los cristianos reformados que deseen entrar en plena comunión con la Iglesia Católica, o casarse con una católica, asegura a los ministros católicos que el bautismo, realizado por un ministro de la Reforma, implicó el uso de agua corriente, y la invocación bíblica de Dios como Padre, Hijo y Espíritu Santo», prosiguió el prelado.
Monseñor Gregory afirmó que los católicos y los cristianos reformados “han dado un paso de acrecamiento a esa plenitud de la comunión que se realizará, en obediencia a la oración del Señor – ‘Padre, que todos sean uno’ – en ese día en el que puedan celebrar juntos en unidad de fe y ministerio en la única mesa de la Eucaristía».
La conferencia señaló en un comunicado de prensa que el acuerdo común afirma que el bautismo es «el vínculo sacramental de unidad para el Cuerpo de Cristo, que se realiza sólo una vez, por un ministro autorizado, con un chorro de agua, utilizando la fórmula trinitaria de las Escrituras de ‘Padre, Hijo y Espíritu Santo'».
Añadió que el acuerdo anima a las comunidades cristianas locales a mantener registros de bautismo, una práctica ya realizada en la Iglesia católica.
El comunicado de prensa declaró que otras conferencias episcopales en el mundo del mundo han suscrito acuerdos similares con las comunidades protestantes locales, pero este documento es «sin precedentes» para la Iglesia católica en los Estados Unidos.
Explicó que la Iglesia católica en general ha reconocido la validez de la mayoría de las principales comuniones cristianas desde el Concilio Vaticano II. Sin embargo, en 2002, el Consejo Pontificio para la Unidad de los Cristianos alentó a las conferencias episcopales para que se reunieran con las comunidades cristianas locales con el fin de estudiar y discutir su comprensión mutua del bautismo, para aclarar dudas y preguntas sobre la reciprocidad de las prácticas dentro de las diversas iglesias.