CIUDAD DEL VATICANO, domingo, 12 de octubre de 2008 (ZENIT.org).- Benedicto XVI exigió este domingo el final de la violencia en la India, Irak y la República Democrática del Congo.
El Papa confío a los creyentes esta intención de oración al concluir la misa de canonización de cuatro nuevos santos, en presencia de unos 40 mil peregrinos, en la plaza de San Pedro del Vaticano.
«Os invito a rezar por la reconciliación y la paz en algunas situaciones que provocan alarma y gran sufrimiento: pienso en las poblaciones del norte de Kivu, en la República Democrática del Congo, y pienso en las violencias contra los cristianos en Irak y en la India, a quienes recuerdo diariamente ante el Señor», dijo el Santo Padre».
En el norte de Kivu, violentos combates enfrentan a los rebeldes de Laurent Nkunda contra el ejército congoleño. Organizaciones de derechos humanos han denunciado violencias provocadas contra mujeres y niños, mientras las poblaciones se ven obligadas abandonar sus casas.
En Irak, en los últimos días, han sido asesinados varios cristianos con el objetivo de obligar a los seguidores de Jesús en el país a tomar la vía del éxodo, que en cientos de miles ya han emprendido desde que comenzara el conflicto armado.
En la India, las violencias contra los cristianos, especialmente en el estado de Orissa, ha provocado desde finales de agosto al menos 80 muertos, según han denunciado ante el Sínodo los obispos que representan a ese país.
El Papa concluyó su alocución antes de rezar la oración del Ángelus invocando la protección de María, Reina de los santos, «sobre las sesiones de trabajo del Sínodo de los Obispos, que se encuentra reunido en estos días en el Vaticano» sobre el tema de la Palabra de Dios.