CARACAS, 5 marzo 2002 (ZENIT.org).- El presidente de la Conferencia Episcopal expresó este lunes al ministro del Interior y Justicia Ramon Rodríguez Chacín la preocupación de los obispos por la violencia creciente que existe en el país y la necesidad de tomar acciones concretas que demuestren la intención de rectificar, informó El Universal, diario de Caracas.
Monseñor Baltazar Porras, presidente de la CEV, insistió en que no puede haber diálogo «si no hay un respeto de personas e instituciones, y ese respeto transita por la búsqueda solidaria de la verdad».
Porras manifestó que se le expresó a Rodríguez Chacín que «quisiéramos que tuviera hechos concretos que indiquen que se va por ese camino, no hay duda que esta conflictividad y violencia ha surgido en buena parte de quienes tienen la conducción del Estado».
Este martes debía presentarse al país la propuesta de un pacto de gobernabilidad propiciado por Fedecámaras y la Confederación de Trabajadores de Venezuela (CTV), con el respaldo «moral» de la Iglesia en un documento denominado «Propuesta al país: bases para un Acuerdo Nacional».
A través de esta propuesta ambas instituciones buscan presentar y anunciar «lineamientos para buscar salidas importantes en la reconstrucción del país a mediano plazo», según informó Pedro Carmona Estanga, presidente del organismo cúpula empresarial.
El dirigente empresarial explicó que la participación de la Iglesia será sólo como «una especie de aval moral» pues la iniciativa sería de Fedecámaras y CTV. Agregó que buscarán la adhesión de otros sectores de la sociedad.
Aclaró que en ningún momento el pacto plantea la salida del presidente Hugo Chávez. «Siempre hemos hablado de cambios, de debate nacional, de rectificación, nunca hemos hablado de la salida del presidente», aclaró.