SEUL, 15 nov (ZENIT.org–FIDES).- Mientras Corea espera la visita del Papa, el cardenal Stephen Kim, arzobispo emérito de Seúl, y monseñor Nicholas Cheong, actual arzobispo de la capital coreana, podrían emprender un histórico viaje a la Corea comunista.
Lo ha confirmado el mismo purpurado en declaraciones a la agencia misionera de la Santa Sede, «Fides».
Es la primera vez que los obispos católicos de Seúl viajarán a Corea del Norte. La preparación de la visita tiene lugar después de que en el mes de agosto pasado el presidente de Corea del Norte, Kim Jong-il, afirmara que tiene intención de invitar a visitar el país a los representantes de las siete religiones principales de Corea del Sur: catolicismo, protestantismo, budismo, budismo won, confucianismo, Chondokyo y los cultos tradicionales coreanos.
«Veo la visita de los líderes religiosos al Norte como un primer paso para los intercambios religiosos entre las dos Coreas», ha explicado a «Fides» monseñor Nicholas Cheong, quien no es sólo arzobispo de Seúl, sino también de Pyongyang, la capital comunista.
«Mi mayor deseo es confirmar en la fe a los fieles, a los laicos y sacerdotes que han sobrevivido –explica el arzobispo–. Si entre estos últimos todavía hay algunos que viven, quiero encontrarme con ellos directamente. Si han muerto todos, quisiera rezar en sus tumbas. Por último, quisiera saber cómo viven su fe los católicos norcoreanos».
No se tienen noticias de monseñor Francis Hong Yong-ho, nacido en 1906, quien había sido nombrado obispo de Pyongyang en 1962 (Cf. «El Papa envía una delegación a Corea del Norte»).