Se trata de una iniciativa convocada desde hace doce años por la Conferencia Episcopal Italiana y por las Comunidades judías de Italia destinada a la reflexión y el mutuo entendimiento entre los fieles de las dos religiones monoteístas.
«A expresar mi aprecio y apoyo a esta iniciativa de la Iglesia italiana –dijo el obispo de Roma durante la audiencia general de este miércoles–, deseo de corazón que contribuya al desarrollo de un auténtico diálogo judeo-católico».
Durante el día de hoy, en algunas de las ciudades más importantes de Italia, se han celebrado encuentros y conferencias en los que han intervenido cardenales y obispos de todo el país, así como los líderes de las comunidades judías y rabinos.