SAN SALVADOR, 29 enero 2001 (ZENIT.org).- Cáritas El Salvador prestará atención de emergencia durante los próximos 40 días a casi 6.000 familias (unas 36.000 personas) damnificadas por el terremoto que el pasado 13 de enero asoló este país centroamericano.
Esta organización ha llegado a atender, durante los primeros días tras el terremoto a 15.000 familias (unas 90.000 personas) afectadas por la catástrofe.
Cáritas El Salvador estima, provisionalmente, que el número de familias afectadas por el terremoto se acerca a las 60.000, lo que implica que la organización atenderá las necesidades del diez por ciento de los afectados.
La Cáritas local ha establecido para el futuro, a corto y medio plazo, un programa de actuación que comprende tres fases: emergencia (hasta finales de febrero); transición (a partir de marzo) y reconstrucción integral.
Durante la fase de emergencia, Cáritas El Salvador pretende atender a casi 6.000 familias, facilitándoles los materiales necesarios para poner en pie alojamientos provisionales (plásticos, cuerda, colchas, cepillos de dientes, lámparas, enseres de cocina y cocinas), entregas periódicas de suministros necesarios para el funcionamiento de una casa (toallas, jabón y otros enseres para atender las necesidades de higiene, gas, fósforos) y cestas básicas de alimentos.
La fase de transición intentará proveer a los damnificados de viviendas provisionales necesarias para pasar el invierno y sentar las bases para planificar la fase de reconstrucción integral. El objetivo de esta última fase de intervención, que se prolongará a lo largo de varios años, será la construcción de viviendas dignas y estables y la organización de las organizaciones ciudadanas locales.
Todas las actuaciones de Cáritas El Salvador se desarrollarán según los siguientes criterios:
a) Dar prioridad a la atención en las áreas rurales, las más empobrecidas del país y las menos atendidas por otras instituciones.
b) Promover la organización comunal y la participación ciudadana.
c) Transparencia y constante información.
d) Implicar a los beneficiarios en el desarrollo de los proyectos de asistencia y reconstrucción.
e) Dar atención prioritaria a las personas y familias pobres, sin ingreso mínimo permanente y dispuestas a vincularse a la comunidad.
f) No discriminar por razones de sexo, edad, militancia política o creencia religiosa.
Cáritas Española destinará los 6 millones de dólares pesetas recaudados a colaborar en todas estas tareas. Cáritas El Salvador es una extensa red de solidaridad en cuyo trabajo participan más de 5.000 voluntarios y 200 personas contratadas.