GUATEMALA, 17 mayo 2001 (ZENIT.org).- Según informaron este miércoles fuentes diplomáticas estadounidenses, tres agentes de la Oficina Federal de Investigaciones (FBI) han llegado a Guatemala para investigar el asesinato de una religiosa estadounidense.
La hermana Barbara Ann Ford, de 64 años, fue asesinada el 5 de mayo pasado a sangre fría en una calle de la capital. Trabajaba en Cáritas, institución de ayuda de la Iglesia católica en Quiché, en donde vivía desde 1989.
La religiosa había organizado un amplio proyecto de salud mental, en el que las víctimas de masacres y crímenes de la guerra, narraban sus experiencias. Muchas de estas personas son indígenas mayas que antes del trabajo de la hermana Ford nunca habían hablado de lo que les tocó vivir en los 36 años de guerra del país.
En este contexto, participó en la redacción del informe de Recuperación de la Memoria Histórica (REMHI), elaborado por el obispo Juan Gerardi, quien fue asesinado pocas horas después de su publicación.
«Ya vinieron los agentes del FBI para apoyar la investigación y permanecerán en el país el tiempo que lo requiera el ministro de Gobernación Interior», ha explicado la embajadora estadounidense en Guatemala, Prudence Bushnell.
El último logro de la Hermana de la Caridad de Nueva York había sido la creación de un proyecto de minirriego para comunidades campesinas.
