CIUDAD DEL VATICANO, 22 julio 2001 (ZENIT.org).- Con motivo de la cumbre de los países más industrializados del planeta (G-8), que se ha concluido este 22 de julio en Génova, Juan Pablo II ha dirigido un mensaje a los líderes participantes. Ofrecemos a continuación el texto íntegro de la misiva entregada por el cardenal Angelo Sodano, secretario de Estado vaticano, al primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, para que éste a su vez la hiciera llegar a los jefes de Estado.
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En el momento en el que, como responsables de las ocho naciones más desarrolladas del mundo, os disponéis a reflexionar sobre los problemas más importantes de la vida internacional, deseo aseguraros mi cercanía humana y espiritual. Al mismo tiempo, quiero auspiciar que durante estos intensos días de trabajo no sea excluida de vuestras preocupaciones ninguna persona ni ninguna nación.
Sin dejaros aplastar por el peso de cada una de las cuestiones, estoy seguro de que os comprometeréis a promover una cultura de la solidaridad que permita soluciones concretas a los problemas que más angustian a nuestros hermanos en la vida y en las relaciones con los demás: la paz, la pobreza, la salud y el ambiente.
Al desear de corazón un buen resultado a vuestro encuentro, invoco sobre vosotros la bendición de Dios omnipotente.
Desde el Vaticano, 19 de julio de 2001
IOANNES PAULUS PP. II
[Traducción realizada del italiano por Zenit]