Sharansky dijo al diario «Ha´aretz», en su edición de este domingo, que los intentos de «influenciar el trabajo de la comisión al último minuto pueden solamente perjudicar» a quienes traten de hacerlo.
Representantes de ambas partes implicadas en la disputa sobre la construcción de la polémica Mezquita –la Iglesia católica y el Waqf (comité religioso islámico)–, han advertido recientemente de las implicaciones negativas que podría tener una decisión equivocada de la comisión.
La Comisión debería convocar tener una o dos reuniones esta semana, para decidir sus recomendaciones finales al primer ministro. Tardará otra semana en preparar su informe.