NUEVA YORK, 10 marzo 2002 (ZENIT.org).- El estado de Virginia ha dicho no con una nueva ley al «infanticidio médicamente inducido», como viene definido en el texto de ley el aborto en mujeres en estado avanzado de gestación.
El límite de tiempo tras el cual los abortos son ilegales no se especifica en la norma, que ahora está siendo examinada por el gobernador para la firma final, pero el texto habla de prohibición «de matar a un feto viviente», y parece referirse a abortos realizados después del tercer mes de embarazo.
Los médicos que violen la prohibición podrían ser condenados a penas de hasta 10 años de cárcel.
Virginia había ya aprobado una ley semejante hace poco más de tres años pero había sido declarada inconstitucional por el Tribunal Supremo de Estados Unidos porque no preveía una cláusula que salvaguardase la salud de la madre.
Por esto la nueva versión de la ley contiene una excepción que hace posible este tipo de abortos, conocidos comúnmente como «aborto por nacimiento parcial» («partial birth abortion»), en caso de que la vida de la madre está en peligro.
Los legisladores del estado de Virginia que han votado por la ley esperan así pasar la barrera legal del Tribunal Supremo y crear un precedente que se espera será seguido por otros estados del país.
Semejantes normas estaban ya de hecho en vigor en 31 estados de EE.UU. antes de 1999, cuando la sentencia del Tribunal Supremo las canceló todas de golpe.
Ohio sin embargo desafío la sentencia manteniendo que la propia versión de la ley preveía algunas excepciones. Ese estado ha ganado ya una primera batalla legal, y el pasado septiembre la norma volvió a entrar en vigor. Pero la lucha en los tribunales continúa.
Tanto Virginia como Ohio esperan ahora que les dé una mano el presidente George W. Bush que se ha dicho siempre contrario al «aborto por nacimiento parcial».
Hace un mes, por ejemplo, el Departamento de Justicia hizo saber al tribunal de Cincinnati que está volviendo a reexaminar el caso de Ohio y que el presidente se augura que la ley permanezca inalterada.
Es extremamente raro que Washington emita pareceres sobre casos que no se refieren estrictamente a una ley federal, y la iniciativa indica claramente la voluntad de la Casa Blanca de prohibir los abortos tras el tercer mes embarazo en todo Estados Unidos.
