El deslizamiento del cerro Pucaloma ha provocado, hasta el momento, la muerte a quince personas, cuyos cuerpos han sido rescatados. Otras muchas han resultado heridas, y el número de desaparecidos es aún indeterminado.
En un telegrama enviado por el cardenal Angelo Sodano, secretario de Estado vaticano, al obispo de la diócesis de Coroico –monseñor Juan Vargas Aruquipa–, Juan Pablo II asegura su oración por los desaparecidos y su sincero pésame a los familiares.
Expresando su cercanía espiritual con los heridos y quienes se han quedado sin hogar, el Santo Padre hace también un llamamiento a las instituciones públicas y a las personas de buena voluntad para que presten ayuda eficaz a los afectados «con caridad y espíritu de solidaridad fraterna».
Publicamos a continuación el telegrama del Santo Padre.
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MONS. JUAN VARGAS ARUQUIPA
OBISPO DE COROICO
INFORMADO DEL DESLIZAMIENTO DEL CERRO PUCALOMA SOBRE LA POBLACIÓN MINERA DE CHIMA, QUE HA CAUSADO NUMEROSAS VÍCTIMAS Y HERIDOS, SU SANTIDAD JUAN PABLO II OFRECE SUFRAGIOS AL SEÑOR POR EL ETERNO DESCANSO DE LOS FALLECIDOS Y RUEGA A VUESTRA EXCELENCIA QUE EXPRESE SU SINCERO PÉSAME A LOS FAMILIARES DE LOS MISMOS, ASÍ COMO LOS SENTIMIENTOS DE SU PATERNA CERCANÍA ESPIRITUAL A LOS HERIDOS Y A QUIENES SE VEN PRIVADOS DE SU HOGAR, INVITANDO AL MISMO TIEMPO A LAS INSTITUCIONES PÚBLICAS Y PERSONAS DE BUENA VOLUNTAD A PRESTAR SOLÍCITAMENTE A LOS AFECTADOS AYUDA EFICAZ CON CARIDAD Y ESPÍRITU DE SOLIDARIDAD FRATERNA.
CON ESTOS SENTIMIENTOS Y EN PRENDA DE CONSUELO CRISTIANO, EL SANTO PADRE IMPARTE A LOS DAMNIFICADOS Y A QUIENES LES SOCORREN EN TAN DOLOROSAS CIRCUNSTANCIAS LA CONFORTADORA BENDICIÓN APOSTÓLICA.
CARDENAL ANGELO SODANO
SECRETARIO DE ESTADO DE SU SANTIDAD
[Texto original: Español]