En un telegrama enviado en nombre del Papa por el cardenal Angelo Sodano, secretario de Estado, el Papa ofrece oraciones por los que han sido golpeados por estos actos de terrorismo.
Asimismo confía «las víctimas al amor y a la piedad de Dios, invocando la consolación divina para los que sufren», según ha revelado Radio Vaticano.
En el mensaje, el obispo de Roma condena «todas las formas de violencia y de derramamiento de sangre, renovando su llamamiento a los seguidores de las religiones del mundo y a las personas de buena voluntad para que rechacen todo tipo de agresión».
El Papa pide trabajar por una «nueva era de paz y justicia en la que estas ofensas contra la vida humana y la dignidad no tengan cabida».
En Najaf, a unos 160 kilómetros al sur de Bagdad, miles de personas lloraban en la mañana de este martes y se golpeaban el pecho y la cabeza en signo de dolor durante el funeral del ayatolá Mohammed Baqer al-Hakim.
Hakim era un destacado líder de la mayoría chií de Irak, que estaba a favor de una cautelosa cooperación con las fuerzas de ocupación.
El Consejo de Gobierno de Irak, respaldado por Estados Unidos, del que forma parte el hermano de Hakim, nombró un gabinete de 25 ministros el lunes.