ROMA, jueves, 10 marzo 2005 (ZENIT.org).- Al final de una visita de diez días en a Colombia, Caritas ha lanzado un llamamiento «para que las necesidades de las víctimas del conflicto estén en el centro de la búsqueda de una solución de paz».
«Una paz que, constatando las responsabilidades de las violaciones de los derechos humanos que se han cometido, pueda nacer sobre sólidas bases de un amplio proyecto de participación social», afirma un comunicado.
El texto, distribuido por Caritas Italiana, sintetiza las conclusiones de la visita organizada por Caritas Europa, en el ámbito de la campaña lanzada por Caritas Internationalis a favor de Colombia.
La Iglesia en el país, afirma el comunicado, está «constantemente comprometida por la paz, la reconciliación y el apoyo de los tres millones de desplazados internos a causa de un conflicto que dura desde hace cuarenta años».
La delegación, en la que han participado también diez parlamentarios europeos, visitó a algunas de las comunidades más golpeadas por el conflicto: refugiados, grupos de afro-colombianos en los suburbios de Barranquilla, de Cúcuta, de Florencia y de Quibdó.
Además de encontrarse con los exponentes de la Iglesia local, la delegación de Cáritas fue recibida por el presidente de Colombia Álvaro Uribe Vélez, y por otros representantes del gobierno y observadores internacionales.
«Caritas Europa seguirá apoyando la solución negociada el conflicto armado en el contexto de la búsqueda de la verdad, de la justicia, y de la reparación a favor de las víctimas, con la convicción de que la respuesta militar no puede ser la solución a los problemas sociales que se encuentran en el origen del conflicto», concluye el comunicado.
Se calcula que en el conflicto que sacude a Colombia, país de 42 millones de habitantes, de los cuales el 90% es católico, pierden la vida todos los años unas cuatro mil personas.
ÚLTIMAS NOTICIAS
Mar 10, 2005 00:00