NUEVA DELHI, miércoles, 11 enero 2006 (ZENIT.org).- La web de la Conferencia de los Obispos Católicos de la India (www.cbcisite.com) publicó el lunes una denuncia de la injusticia social que sufren sus habitantes, exponiéndola como el desafío que enfrenta el país en el año recién estrenado.
Cinco puntos han bastado para sintetizar una realidad que encabeza el tema del «derecho al alimento», según se desprende del texto publicado.
«Un país que tiene un 70% de la población que depende de la agricultura para su subsistencia, suma 320 millones de personas que se van a la cama sin alimento, y 10 mil muriéndose de los dolores del hambre cada día», describe el texto.
Cita además que «el 99% de las familias adivasi» [de etnia tribal. Ndr] en los Estados de Jharkhand y Rajasthan enfrenta hambre crónica este año. La denuncia se completa con el hecho de que en sólo un año 250 granjeros se suicidaron en Yavatmal –en la región de Vidarbha, en el Estado de Maharashtra–.
La infancia es protagonista también en este panorama, donde los «niños de la calle», que «trabajan en los cruces», son «acosados por la policía, brutalizados, metidos en repugnantes y perversos hogares juveniles, incluso en prisiones de adultos, dejados a la muerte en una democracia en la que el presidente Kamal dice que los niños son el futuro de la nación».
«¿Qué niños? ¿De qué país?», cuestiona este mensaje.
Alude igualmente al «feticidio femenino», denunciando que «el anhelo por el niño y el desprecio hacia la niña en la India se ha incrementado drásticamente en la última década, más en las regiones prósperas del país».
No pasa tampoco por alto la situación laboral de los trabajadores que carecen de una estructura organizativa: «constituyen el 90% de la fuerza laboral en la India, pero no tienen sindicatos, ni derechos, ni seguridad social, ni fondo de previsión, ni pensión, ni seguridad en el trabajo, ni escuelas o centros de salud para sus hijos, ni futuro o esperanza».
Cierra los «desafíos» para la India en 2006 el «derecho al alojamiento»: «los pobres encuentran refugio a cielo abierto en cementerios y vertederos», se advierte.
Superan la cifra de 1.080 millones los habitantes de la India; aproximadamente el 1,6% son católicos –de rito latino, siro-malabar y siro-malankar–.