El fallecimiento de Rugosa el pasado sábado de un cáncer de pulmón a los 61 años tiene lugar cuando Kosovo, provincia autónoma de Serbia-Montengro administrada por la ONU y habitada por una mayoría albanesa, se prepara para comenzar las negociaciones sobre su estatuto definitivo.

En un telegrama enviado por el cardenal Angelo Sodano, secretario de Estado, al obispo Zef Gashi, S.D.B., administrador apostólico de Prizren (Srbija i Crna Gora), con motivo del fallecimiento, el Papa transmite «su más sentido pésame al pueblo y a la administración del Kosovo por el luto que tanto les afecta».

«El Santo Padre les garantiza su cercanía en estos momentos de prueba y, mientras recuerda las sólidas virtudes civiles que han inspirado la vida y el generoso servicio prestado por el difunto a sus conciudadanos, pide a Dios abundantes bendiciones para los amados habitantes de Kosovo», añade el mensaje.

Rugova fue elegido en 2002 y 2004 como presidente de Kosovo y su Liga Democrática de Kosovo (LDK) fue el partido más votado en ambas elecciones parlamentarias celebradas en la provincia.