MÉXICO, D.F., martes, 13 junio 2006 (ZENIT.org–El Observador).- El Canto Gregoriano sigue siendo el canto oficial de la Iglesia católica de rito latino, recuerda Julieta Vega García, licenciada en Filosofía y Letras –especialidad de Historia del Arte– y doctora en Geografía e Historia dentro del área de Musicología.
Es titulada profesional como profesora de piano por el Conservatorio Superior de Música de Granada (España) y directora de la «Schola Gregoriana Ilíberis» desde 1986.
Sus líneas de investigación se centran en el Canto Gregoriano: patrimonio, teoría y práctica y la música en los conventos de clausura y otros entornos eclesiásticos.
–¿Qué es el «Canto Gregoriano»?
–Julieta Vega García: Es un canto milenario, patrimonio cultural de la humanidad y sigue siendo el canto oficial de la liturgia romana, como recordó el propio Juan Pablo II en 2003 en un Quirógrafo sobre la música sacra –con motivo del centenario del Motu Proprio «Tra le sollecitudini», en que recordaba las normas del Vaticano II acerca de la música litúrgica–.
–¿Por qué se le llama así?
–Julieta Vega García: Porque se atribuye su autoría al Papa San Gregorio Magno. Uno de los puntos que más llaman la atención en su fecundo pontificado es su celo por el perfeccionamiento de la liturgia, alcanzando gran importancia su impulso en la organización definitiva del canto litúrgico, que se conoce bajo el nombre de canto gregoriano. A los 35 años empezó a dedicarse al servicio de Dios. A él se debe la primera gran reforma de la Liturgia, de manera especial del Canto (de ahí el nombre de Canto Gregoriano, que está en la base de la liturgia occidental).
–¿Cuándo surge el Canto Gregoriano?
–Julieta Vega García: Su origen está en la salmodia judía, pero las primeras partituras que se conservan se escribieron en el Renacimiento Carolingio, a finales del siglo IX
–¿Cuál es la relación entre el Canto Ambrosiano y el Canto Gregoriano?
–Julieta Vega García: Antes de la unificación que se produjo en los siglos IX-XI, cada región tenía sus propias tradiciones: el Ambrosiano en Milán, el visigótico-mozárabe en España, el viejo romano, el galicano…El gregoriano parece ser una síntesis entre galicano y viejo romano. En determinadas piezas hay mucha relación entre el Ambrosiano y el Gregoriano, pero el ambrosiano es algo más ornamentado melódicamente.
–¿Existe actualmente producción de Canto Gregoriano? ¿Cuál es la aceptación social que se le otorga?
–Julieta Vega García: Realmente la producción (entendida como composición) es inexistente. Hay buena aceptación social de este antiguo repertorio, tanto en conciertos como en misas, conferencias, asistencia a cursillos, compra de música grabada, entre otros tipos de consumo.