SYDNEY, lunes, 25 junio 2007 (ZENIT.org).- Conocer «al Dios del gran corazón», Aquél cuyo amor misericordioso es real y está definido «en la compasión del «Dios-hecho-hombre» en el Sagrado Corazón de Jesús»: es la propuesta de este mes para los jóvenes que peregrinan «virtualmente» hacia Sydney (Australia), donde se celebrará la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) en 2008.
A ello ayuda descubrir precisamente la devoción de la Iglesia al Sagrado Corazón de Jesús, meta de la última edición de la e-PEREGRINACIÓN> («e-PILGRIMAGE>») o peregrinación «on-line», un instrumento nuevo en las JMJ para llegar a los jóvenes peregrinos y prepararles la gran encuentro de fe y fiesta con el Papa.
Para vivir esta experiencia, la e-PEREGRINACIÓN> de este mes se lanza con el versículo del Evangelio de Juan (7,38): «De su interior brotarán ríos de agua viva…».
«No somos simplemente espíritus»; «la dimensión física, visible y sacramental de la vida tiene la misma importancia que la dimensión espiritual, intelectual e invisible», apunta en su habitual «Mensaje de Esperanza» a los jóvenes el obispo Anthony Fisher O.P. –coordinador del evento-.
«Cuando vemos a Cristo en la Eucaristía o en la cruz o en una estampa y le hablamos» «te encuentras con el Dios que ha compartido nuestros sufrimientos para que pudiera compartir su alegría con nosotros. El Dios que está a nuestro lado. El Dios con el gran corazón», confirma.
El prelado propone contemplar el testimonio de la doctora de la Iglesia Santa Catalina de Siena (1347-1380), «una joven normal en la que Dios obró maravillas», constata.
Catalina experimentó e insistió en que «desde toda la eternidad Dios está loco de amor por cada uno de nosotros», y «es ese amor enloquecido el que nos da el ser»; «la manifestación más perfecta de ese amor fue cuando derramó su sangre por nosotros», recuerda el obispo Fisher.
Llena de amor «por el gran corazón compasivo de Cristo», la joven Santa Catalina «escribió mucho sobre la Sangre Preciosa que manó del corazón y del costado de Cristo y que salva el mundo, borra las mentiras y la maldad, nos da nueva esperanza y es recibida por nosotros en la Eucaristía», añade.
El núcleo de la fe cristiana, de hecho, «es la realidad del amor íntimo y sin límites de Dios por nosotros, encarnado definitivamente en Jesucristo, Dios y hombre», recalca la sección «Fundamentos de fe» del boletín.
«Este misterio, que en su plenitud trasciende nuestra capacidad intelectual –se explica-, ha sido rezado y meditado por los cristianos desde tiempos muy antiguos en el sagrado símbolo del costado abierto y de las otras heridas de Jesús y en el Corazón traspasado de Jesús».
Una forma práctica de contemplarlo es rezando la «Coronilla de la Divina Misericordia» -que propone la e-PEREGRINACIÓN>-, devoción que comenzó a difundirse a través de la religiosa polaca Faustina Kowalska, canonizada por Juan Pablo II.
En «Escritos Inspirados», la peregrinación virtual retoma el mensaje del Papa de la pasada Cuaresma, en el que se lee: «Contemplar «al que traspasaron» nos llevará a abrir el corazón a los demás, reconociendo las heridas infligidas a la dignidad del ser humano».
Para profundizar en éste y otros temas, y conocer la forma de rezar la Coronilla de la Divina Misericordia, basta con descargar en el propio ordenador el boletín (en formato «pdf») de junio de e-PEREGRINACIÓN> haciendo clic en http://www.wyd2008.org/index.php/es/content/download/62682/541356/file/ePILGRIMAGE_June_2007_edition_es.pdf.
Del 15 al 20 de julio de 2008 la ciudad de Sydney acogerá la JMJ que reunirá a jóvenes de todo el mundo en torno al Papa. Se espera medio millón de peregrinos en esta primera visita de Benedicto XVI a Australia.
«Recibiréis la fuerza del Espíritu Santo, que descenderá sobre vosotros, y seréis mis testigos» (Hechos 1, 8) es el lema elegido para la convocatoria.
Más información e inscripciones en la web plurilingüe de la JMJ’08: www.wyd2008.org.