CIUDAD DEL VATICANO, miércoles, 8 abril 2009 (ZENIT.org).- «En Jordania los musulmanes esperan al Papa al menos como los cristianos». Son palabras de la ministra jornada de Turismo y Antigüedades, la señora Maha Khatib, tras participar en la audiencia general de este miércoles, concedida por Benedicto XVI en la plaza de San Pedro del Vaticano.
Tras la catequesis, en el atrio de la basílica vaticana, el Papa mantuvo una conversación con la señora Khatib, de confesión musulmana, quien estaba acompañada por el ingeniero Rustom Mkhjian, cristiano ortodoxo, responsable del sitio arqueológico del Bautismo de Jesús, y por el católico Tayseer Ammary, consultor del ministerio.
Los tres forman parte de los principales organizadores de la acogida a Benedicto XVI que dentro de un mes, el 8 de mayo, aterrizará en Amán, primera etapa de su peregrinación a Tierra Santa.
«Hemos venido para dar las gracias al Papa por el honor que nos concede de visitar nuestra tierra», ha afirmado la ministra a «L’Osservatore Romano».
«En nombre de los reyes, del gobierno y de todo el pueblo –ha añadido–, queremos asegurarle que Jordania está haciendo lo posible para ofrecer una digna y cálida acogida».
«Benedicto XVI –concluye la ministra, que al final de la audiencia fue recibida por el arzobispo Dominique Mamberti, secretario para las relaciones con los Estados– podrá ver con sus propios ojos un país en el que conviven pacíficamente fieles de varias religiones: un modelo para todo Oriente Medio».