El obispo auxiliar de La Plata Alberto Bochatey Chaneton OSA bendijo a varias madres gestantes, en el Día del Niño por Nacer, en la naciente parroquia de los Santos Mártires Inocentes, en el barrio 5 de Mayo, de Cambaceres, en el partido de Ensenada.

Desde hace quince años, en Argentina, el Día del Niño por Nacer se celebra el 25 de Marzo, en coincidencia con la solemnidad de la Anunciación del Señor que, este año, por tratarse de Semana Santa, pasó al lunes 8 de abril.

La bendición propiamente dicha tuvo lugar frente a la Cruz Fundacional de la parroquia, en el predio donde se levantará el templo.

Y luego tuvo lugar una procesión hacia el Centro de Día municipal; donde, provisionalmente, se celebra la Santa Misa.

El prelado puso de relieve, en su homilía, que “Celebrar la vida como don de Dios, desde la concepción hasta la muerte natural es celebrar la dignidad de la persona. Todos tenemos una dignidad que nos es propia, que nos pertenece, por ser amados por Dios y poder amar a Dios. Amar y ser amados es la clave de la libertad de todas las personas, que nadie nos la concede sino que es un don propio de la persona humana”.

Agregó que “toda madre y todo padre, sabe o debería saber, que la vida que ha engendrado es la de una persona capaz de amar y necesitada de ser amada. ¡Y esto es así porque Dios es amor y sólo trasmite amor especialmente en la vida, en Cristo!” Dijo, también, que “los graves desafíos que enfrenta la vida en nuestros días, nos exigen ser auténticos, responsables y personas verdaderamente humildes, que reconocen la necesidad de un Dios Padre. Para amar la vida de los hijos es necesario saber amar al Padre, vivir en la vida del Padre, la vida de la gracia en Cristo Jesús”.

“En Cristo –concluyó-, el misterio de la cruz se hace luminoso por la resurrección y la vida. Cada madre o padre que enfrenta la vida del propio hijo como un sacrificio, como un sufrimiento o una cruz; podrá encontrar en Cristo el camino, la verdad y la vida. El respeto a la vida es respeto a Cristo, es respeto al orden de Dios en el mundo, es la base de la paz humana y la paz social”.

Hacia un Santuario de la Vida

El arzobispo de La Plata Héctor Aguer anunció la creación de la parroquia de los Santos Mártires Inocentes el pasado 28 de diciembre; con territorio de las parroquias Sagrado Corazón de Jesús y Nuestra Señora de la Merced. Y el decreto de erección y el nombramiento de su primer administrador parroquial, padre Cristian Viña, son del 9 de febrero pasado, día en que el obispo auxiliar de La Plata Nicolás Baísi, presidió la Santa Misa conclusiva de la Misión Juvenil Arquidiocesana, y la plantación de la Cruz Fundacional.

En su momento, monseñor Aguer explicó que “son poquísimas las parroquias, en todo el mundo, que llevan esta denominación. Consideramos que, hoy más que nunca, debemos venerar a aquellos niños, menores de dos años, que Herodes mandó matar con el fin de eliminar, entre ellos, a Jesús (Mt 2, 13 – 18). Y elevar nuestras oraciones por los millones de niños víctimas del aborto; los muertos por la violencia, la explotación, la desnutrición infantil y toda clase de atropellos a su dignidad”.

Sostuvo, igualmente, que “intentaremos que sea un verdadero santuario de la vida. Y que el testimonio heroico de quienes, aun sin saber hablar confesaron a Cristo, nos lleve a los adultos a luchar por la defensa de toda vida humana, desde la concepción hasta la muerte natural. Y por el derecho humano a ser gestado, nacer, crecer y vivir con dignidad, en el seno de una familia; fundada en el matrimonio de un varón y una mujer”.

Durante todo 2012, sacerdotes y seminaristas del Seminario Mayor San José de La Plata misionaron en el barrio. Y, pocos días antes de Navidad, tuvo lugar la Pre Misión juvenil.