En el motu proprio “Fidelis dispensator et Prudens”, publicado el pasado 24 de febrero, el papa Francisco instituyó un Consejo de Economía que tiene como función «ofrecer orientaciones sobre la gestión económica y vigilar las estructuras y las actividades administrativas y financieras de los dicasterios de la Curia Romana y de las instituciones de la Santa Sede».
El documento especifica también que este Consejo estará compuesto por 15 miembros, 8 de los cuales serán «elegidos entre los cardenales y los obispos» y los otros 7 «son expertos laicos de varias nacionalidades, con competencias financieras y reconocida profesionalidad».
Según informó la Oficina de Prensa de la Santa Sede en un comunicado, el Santo Padre ha nombrado hoy a los miembros del Consejo de Economía para un quinquenio.
Los ocho cardenales y obispos son los siguientes:
Reinhard Marx, arzobispo de Munich y Frisinga (coordinador); Juan Luis Cipriani Thorne, arzobispo de Lima; Daniel N. DiNardo, arzobispo de Galveston-Houston; Wilfrid Fox Napier, arzobispo de Durban; Jean-Pierre Ricard, arzobispo de Burdeos; Norberto Rivera Carrera, arzobispo de México; John Tong Hon, obispo de Hong Kong; Agostino Vallini, vicario general de Su Santidad para la diócesis de Roma.
Y los siete expertos:
Joseph F.X. Zahra, Malta (vicecoordinador); Jean-Baptiste de Franssu, Francia; John Kyle, Canadá; Enrique Llano Cueto, España; Jochen Messemer, Alemania; Francesco Vermiglio, Italia; George Yeo, Singapur.
Siguiendo las indicaciones del motu proprio, los miembros designados provienen de diferentes áreas geográficas, un hecho que refleja la universalidad de la Iglesia.
La primera reunión del Consejo está programada para el mes de mayo.
Ver también: El motu proprio del Papa Francisco: ‘Fidelis dispensator et prudens’