ESTAMBUL, 15 febrero 2002 (ZENIT.org).- En una audiencia preliminar el 13 de febrero en Lahore, el Tribunal Supremo de Paquistán ha decidido revisar la condena a la horca de Ayub Masih, cristiano acusado de blasfemia contra el profeta Mahoma.
Un tribunal de dos jueces del Tribunal Supremo sentenció que la apelación de Masih era «un caso adecuado para una ulterior consideración», a la luz de aparentes irregularidades legales en el proceso.
El caso debería ser analizado «en las próximas dos o tres semanas» por el Rribunal, revela en declaraciones a la agencia Compass Direct el abogado de Masih, Abid Hassan Minto.
Será la última apelación judicial de Masih, encarcelado desde octubre de 1996 y mantenido en aislamiento en la galería de la muerte durante cerca de cuatro años, en la prisión New Central de Multan.
Masih, que tiene ahora 34 años, fue inculpado por el testimonio verbal de un demandante musulmán que declaró que durante una conversación privada su vecino cristiano había difamado a Mahoma elogiando el libro de Salman Rushdie «Los versos satánicos».
Más de tres años después de la sentencia inicial de un tribunal de Sahiwal, el tribunal de apelación de Multan rechazó su apelación en julio.
Según la legislación vigente, el abogado Minto argumentó el 13 de febrero ante el Tribunal Supremo que el caso de Masih era excepcional. En especial, destacó que las condiciones requeridas por la ley coránica no habían sido observadas en el proceso contra su cliente. Explicó que la ley islámica requiere un examen previo al juicio de las pruebas y de los testigos del proceso para determinar si hay justificación para proseguir con el caso.
Minto, un prominente abogado musulmán de derechos humanos representó con éxito al cristiano Gul Masih, absuelto en 1994 por el tribunal de apelación de Lahore, en lo que los jueces denominaron acusaciones de blasfemia «inventadas».
Sin embargo, el caso por blasfemia de Ayub Masih es el primero de este género que llega al nivel del Tribunal Supremo.