BOGOTÁ, 3 septiembre 2003 (ZENIT.org).- De acuerdo con el vicepresidente de la Conferencia Episcopal colombiana, monseñor Luis Augusto Castro Quiroga, en el país «la Iglesia no ha perdido la esperanza de reanudar el diálogo con las FARC (Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia)», aún siendo «conscientes de las crecientes dificultades».
En el proceso de solución del conflicto, el arzobispo de Tunja excluye en cualquier caso la posibilidad de una ley del «Punto final» que garantice a los guerrilleros la impunidad por los crímenes cometidos, según las declaraciones que recogió el martes pasado «Radio Vaticana».
«El diálogo es siembre el mejor camino», subrayó, «pero hablar de “Punto final” es como decir que los sufrimientos soportados por nuestro pueblo en estos años no tienen ningún valor».
En cuanto a la situación de las negociaciones con las FARC, monseñor Castro afirmó: «Estamos dispuestos a escucharles y a mantener encuentros donde y cuando quieran. Con la debida autorización del gobierno, estamos trabajando para que este encuentro tenga lugar pronto».
Además, el prelado subrayó el cambio de actitud registrado entre los guerrilleros. «Al no presentarnos como representantes institucionales, el encuentro ha tomado un cariz distinto, dado que la otra parte sabe que trata con la Iglesia, no con el ejecutivo», reconoció.
«Soy optimista y confío en alcanzar en breve plazo los objetivos fijados», concluyó el arzobispo de Tunja.
