El pontífice pronunció su deseó al final de su encuentro con los peregrinos que participaron en la audiencia general en el patio de la residencia pontificia de Castel Gandolfo, a unos 30 kilómetros de Roma, donde transcurre sus vacaciones en este verano boreal.
«Os invito, queridos jóvenes a dedicar parte de las vacaciones veraniegas a experiencias significativas de solidaridad», afirmó con voz más clara que en días pasados. Se trata de una invitación que ha repetido en varias ocasiones a los jóvenes en sus encuentros públicos.
Entre los peregrinos se encontraban algunas parejas de recién casados. Al saludarles, el obispo de Roma les deseó que «puedan disfrutar en vacaciones de la serenidad de vuestra unión».