Como es tradición en las Iglesias de rito oriental, la elección del nuevo arzobispo, el padre Louis Sako, tuvo lugar por parte del Sínodo de los Obispos de la Iglesia Caldea en la reunión que mantuvo en Bagdad entre el 16 y el 24 de octubre pasado. Para ratificar su comunión con la Iglesia universal, el obispo de Roma ofrece su asentimiento a la elección.

El nuevo arzobispo, que hasta ahora era párroco en la parroquia del Perpetuo Socorro en Mosul, nacido el 4 de julio de 1948, se doctoró en Patrología Oriental en el Instituto Pontificio Oriental de Roma y en historia en la Sorbona de París.

Durante el período del embargo contra Irak, fundó con la ayuda de médicos y farmacéuticos un dispensario médico para los pobres. Ha sido rector del Seminario patriarcal durante cinco años, desde 1997.

Por el momento no se ha anunciado el asentimiento de Juan Pablo II a la elección del sucesor del patriarca caldeo de Bagdad, Raphael Bidawid, fallecido el 7 de julio pasado en Beirut.