LES COMBES, domingo, 24 julio 2005 (ZENIT.org).- Tras el último atentado en la localidad turística de Egipto, Sharm el Sheij, Benedicto XVI pidió a todos los creyentes rezar para que Dios detenga «la mano asesina» de los terroristas.
El pontífice lanzó su llamamiento desde la explanada alpina situada junto al chalet en el que transcurre sus vacaciones en el Valle de Aosta, ante ocho mil personas congregadas para rezar con él a mediodía la oración mariana del Ángelus.
«Estos días de serenidad y descanso han quedado turbados por las trágicas noticias de execrables atentados terroristas que han causado muerte, destrucción y sufrimiento en varios países como Egipto, Turquía, Irak, Gran Bretaña», recordó el Papa.
Tras confiar «a la divina bondad los difuntos, los heridos y sus seres queridos, víctimas de estos gestos que ofenden a Dios y al hombre», el Santo Padre invitó a elevar oraciones «al Omnipotente para que detenga la mano asesina de quienes los han cometido, movidos por fanatismo y odio, y convierta sus corazones a pensamientos de reconciliación y de paz».
Este sábado, la Santa Sede publicó el mensaje que Benedicto XVI envió a las autoridades civiles y religiosas de Egipto nada más recibir la noticia de la masacre que tuvo lugar en Sharm el Sheij.
«Al condenar estos actos sin sentido, Su Santidad pide a todos que renuncien al camino de la violencia, que causa demasiados sufrimientos a las poblaciones civiles y que, por el contrario, emprendan el camino de la paz», afirma el mensaje, enviado a través del cardinal Angelo Sodano, secretario de estado.
El portavoz de la Santa Sede, Joaquín Navarro-Valls, reveló este sábado que al llegarle la noticia de los últimos atentados «el Papa se retiró inmediatamente para rezar por las víctimas y los heridos».
Al recibir el premio Saint-Vincent de periodismo, concedido por la Región italiana del Valle de Aosta, el director de la Oficina de Información del Vaticano calificó estos atentados como «actos que son fruto de un tremendo nihilismo».
«Un diabólico designio contra el hombre» es el título de portada de este domingo de la edición en italiano de «L’Osservatore Romano» al informar sobre los atentados en Egipto.