ROMA, domingo 3 de abril de 2011 (ZENIT.org).- Permitir a las Iglesias orientales ser protagonistas de la nueva evangelización, preparar propuestas para el sínodo que se realizará en el 2011 y las dificultades de jurisdicción de las Iglesias orientales en un mundo que se globaliza y donde siempre más los territoriales contienen más fieles de otros ritos.
Estos fueron los temas centrales del seminario “La nueva evangelización en el interior y exterior: una perspectiva católica oriental” que se realizó el pasado jueves 31 de marzo en Roma, en el Pontificio Instituto Oriental, en coincidencia con la visita ad Limina de los obispos siro-malabares y siro-malankeses.
En la inauguración de la jornada el cardenal Leonardo Sandri, prefecto de la Congregación para las Iglesias Orientales se dirigió a los 35 obispos y a los presentes indicando su deseo que estas Iglesias puedan también ellas ser protagonistas activas de la misionaridad de la Iglesia y la nueva evangelización.
Los conferenciantes fueron: el eparca de Palai, Mar Joseph Lallarangatt sobre la eclesiología de comunión desde la perspectiva oriental; seguido por monseñor Natale Loda, docente de la Pontificia Universidad Lateranense que explico la nueva evangelización de los católicos orientales.
Concluyó Pablo Gefaell, docente de la Pontificia Universidad de la Santa Cruz, que profundizó las problemáticas de los fieles orientales fuera del territorio de su Iglesia sui iuris.
Entrevistado por ZENIT, mosneñor Natale Loda explicó que después de la creación del Pontificio Consejo para la Nueva Evangelización, y en vista del próximo sínodo general de los obispos del 2012, el debate y los temas de la jornada se concentraron sobre “cómo hacer para que la nueva evangelización que es un derecho y deber para todos los fieles cristianos, pueda llegar también al contexto de las Iglesias orientales”.
Porque a pesar de las problemáticas de diverso tipo, explicó, “sabemos que la nueva evangelización no tiene más un espacio solamente territorial, como indicó Juan Pablo II en la encíclica Redemptoris Missio, ahora estamos abiertos a todas las nuevas fronteras”.
Monseñor Loda precisó que “ha sido especificado también en los lineamenta de la XIII Asamblea general ordinaria del sínodo de obispos del 2012, que deberá ser una respuesta adecuada a los signos de los tiempos y a las necesidades de los hombres y pueblos de hoy.
“Esta nueva evangelización – prosiguió el profesor de la Lateranense- es la promoción de una cultura radicada en el evangelio y destinada a las Iglesias orientales. Es necesario a pesar de las contradicciones de las culturas actuales, llevar a Cristo y las Iglesias orientales no están excluidas”.
Una tarea que requiere empeño y en la cual “también ellos son actores de esta nueva evangelización” que tiene que buscar de entrar en donde la fe nunca llegó, por lo tanto “es necesario reproponer la inculturación en sus culturas, la propuesta de Cristo en modo que entre en lo profundo.
“Pensemos por ejemplo los problemas importantes de carácter cultural”, apuntó.
Y específicamente indicó: “En India con las castas, hay situaciones en las que vive la cristiandad y donde es necesario encarnar el evangelio para responder y trabajar en la misión de la Iglesia”.
Seguramente – indicó – el Concilio tuvo un rol determinantes en la evangelización, si bien “aún hay que trabajar mucho para aplicar el Vaticano II. Y cuando alguien habla de un Vaticano III, probablemente no ha visto bien, porque muchas intuiciones y nuevas lecturas de la eclesiología como de la Iglesia misma, aún deben encontrar aquellas aplicaciones”.
Sobre este trabajo de inculturación monseñor Loda recordó que “en todas las culturas hay elementos buenos que no solamente no se oponen, sino que en el cristianismo pueden transformarse un ulterior testimonio para el pueblo y para aquellos que tienen que recibir la Nueva noticia”.
Además “las Iglesias orientales en India tienen una fuerza muy grande gracias a los sacerdotes y las monjas. Y a pesar de que no hayan posibilidades económicas ellos realizan una obra ya enorme”.
“India es grande como un continente – continuó monseñor Loda – con una situación política que goza de una cierta tranquilidad. Pensemos por ejemplo a otras partes del mundo donde realmente la evangelización y el testimonio pone en peligro la vida de aquellos que allí trabajan y actúan”.
“Esto nos debe llevar además de apoyarlos con la oración, a buscar una tutela para estas personas”.
Sobre la figura de Madre Teresa, el profesor de la Lateranense explicó que “ella es un icono para toda la India más allá de su pertenencia a una región, y muchas personas en este variado universo corren el riesgo de no saber que ella era católica, claramente fuera de los ambientes cristianos”. Ella ha enseñado que “la verdadera caridad y el anuncio no es una imposición pero una proposición que va hacia las necesidades de la gente y de los pobres”.
El rector del Pontificio Instituto Oriental reiteró que la “problemática de la jurisdicción es muy importante porque las poblaciones en India se encuentran muchas veces fuera del propio territorio y en este tema por lo que se refiere a India, el derecho canónico no es muy claro”.
Hay muchos siro malabareses – explicó – que se encuentran fuera de su territorio tradicional y uno se pregunta como evangelizarlos. Un gran problema. Esto será tratado en las discusiones que serán antes del próximo sínodo”.