Esto significa que, una vez que los zapatistas hayan sido escuchados por los legisladores, «han de aceptar la ley resultante» que éstos decidan libre y conscientemente, indica el documento episcopal de tres cuartillas que ha sido dado a conocer hoy.

El Episcopado pide al Congreso «escuchar atentamente»» a la delegación del EZLN, como parte del diálogo para «desactivar la guerra» que se ha dado en el estado de Chiapas desde el 1 de enero de 1994.

El documento pide que durante la marcha zapatista se eviten actitudes discriminatorias y racistas, así como cualquier provocación o agresión violenta, pues estas manifestaciones tendrían efectos deletéreos sobre el proceso de paz.