La exposición inaugurada hoy con el título «Compromiso con la imagen: fotógrafos negros contemporáneos» incluye una «Última Cena», de la fotógrafo Renne Cox, en la que ella misma posa desnuda, en el centro, haciendo las veces de Cristo y con la intención manifiesta de «criticar a la Iglesia católica por el papel que la mujer no juega en ella».

No es la primera vez que el Museo de Brooklyn recurre a este tipo de estrategias publicitarias. En 1999 se ganó muchos artículos de los periódicos al albergar una exposición de autores británicos contemporáneos, en la que figuraba una Virgen María realizada con excrementos de elefante y recortes de revistas pornográficas. Recibió 170.000 visitas.