LONDRES, 25 marzo 2002 (ZENIT.org).- La Justicia de Inglaterra y Gales no ha aprobado la eutanasia, afirma un autorizado exponente de la Iglesia católica al comentar el caso de «Miss B».
El 22 de marzo, la juez del Alto Tribunal de Justicia, Elizabeth Butler-Sloss, concedió la posibilidad a una señora de 43 años, cuyo nombre no ha querido revelarse (se le conoce como «Miss B»), de morir, retirándole el respirador al que vive conectada a causa de una enfermedad.
El arzobispo de Cardiff, monseñor Peter Smith, presidente del Departamento de Responsabilidad Cristiana y Ciudadanía de la Conferencia Episcopal de Inglaterra y Gales, ha comentado la sentencia explicando que no se trata de un caso de eutanasia.
«Las circunstancias en las que Miss B se encuentra son tristes y muy difíciles. Está claro que es una impresionante y valiente señora que despierta gran simpatía», afirma al arzobispo de Cardiff.
«Al tribunal se le preguntó que sentenciara si era legalmente competente para tomar la decisión de rehusar el tratamiento de prolongación de la vida que se ha convertido en una carga», añade monseñor Smith.
«En este caso, el tribunal ha decidido que Miss B era legalmente competente para tomar tal decisión. El derecho de un paciente a rechazar tal tratamiento ha sido desde hace tiempo reconocido como legal y moralmente aceptable», añade.
«Es importante que quede claro, sin embargo –concluye el arzobispo de Cardiff–, que este caso no implica cuestiones sobre la eutanasia o suicidio asistido y no crea ningún precedente a este respecto».
Miss B, de 43 años, está prácticamente postrada en la cama a causa de una parálisis. Tiene un 1% de posibilidades de recuperarse, pero sólo puede vivir gracias a un respirador.