CIUDAD DEL VATICANO, miércoles, 23 noviembre 2005 (ZENIT.org).- Benedicto XVI condenó este miércoles la «plaga social» de la usura y pidió luchar contra ella a través de la prevención, la solidaridad y la educación en la legalidad.
El Papa lanzó su llamamiento a concluir la audiencia general de este miércoles, en la que se congregaron más de 25.000 peregrinos, entre los que se encontraban unos 2.000 miembros de la Consejo Nacional Italiano Contra la Usurua.
Con la participación en el encuentro con el Papa y con una posterior celebración eucarística en la Basílica de San Pedro, presidida por el secretario de la Conferencia Episcopal Italiana, el obispo Giuseppe Betori, esta asociación de voluntarios de inspiración cristiana celebró sus diez años de vida.
«Queridos amigos –les dijo el Santo Padre–, vuestra numerosa presencia me ofrece la oportunidad de expresar mi vivo aprecio por la generosa y valiente tarea que lleváis a cabo ayudando a las familias y a las personas víctimas de la deplorable plaga social de la usura».
«Deseo que colaboren muchas personas con vosotros para sostener vuestro encomiable compromiso en el ámbito de la prevención, la solidaridad y la educación en la legalidad», añadió.
El Consejo ofrece garantías ante los bancos o asistencia técnica para liberar de sus tenazas a las víctimas o a las posibles víctimas de la usura, y anima actividades culturales y de formación para promover el respeto de la legalidad.