STAMFORD/PEKÍN, martes, 29 noviembre 2005 (ZENIT.org).- La violencia se ha empleado en la detención, el pasado 18 de noviembre, de dos de los seis sacerdotes católicos de la diócesis de Zhengding, en la provincia china de Hebei.
A última hora del lunes un comunicado de «The Cardinal Kung Foundation» recibido en Zenit confirmó que, además de ser arrestados, fueron severamente golpeados el padre Wang Jin Shan y el padre Gao Lingshen –quien sangraba abundantemente por la boca–, ambos en torno a los 50 años de edad,.
A los sacerdotes Guo Zhijun –36 años–, Zhang Xiuchi –60 años–, Peng Jianjun –30 años— y Zhang Yinhu –45 años— se les puso el mismo día bajo arresto domiciliario, pero posteriormente fueron detenidos oficialmente; permanecen en la oficina de seguridad de Gaocheng. Se desconocen más detalles sobre su situación.
Por su parte, el obispo Julio Jia Zhiguo, detenido el pasado 8 de noviembre, permanece bajo custodia policial. Tampoco se tienen otras noticias sobre el prelado.
Todos los detenidos pertenecen a la Iglesia «no oficial». En China el gobierno permite la práctica religiosa sólo con personal reconocido y en lugares registrados ante la Oficina de Asuntos Religiosos y bajo el control de la «Asociación Patriótica» (AP). De ahí la diferencia que afirman entre una Iglesia «oficial» y los fieles que tratan de salirse del citado control para ponerse en obediencia directa del Papa formando la Iglesia «no oficial» o «clandestina».
Ya adelantaba recientemente la agencia del Pontificio Instituto de Misiones Extranjeras (PIME) «AsiaNews» que «ante el temor de que la visita de Bush fuera utilizada como caja de resonancia para enviar al mundo mensajes y peticiones, el gobierno chino arrestó al obispo Julio Jia Zhiguo y a algunos sacerdotes».
Por su parte, el pasado 21 de noviembre –el día siguiente a la finalización de la visita del presidente estadounidense George W. Bush a China–, dos sacerdotes católicos «clandestinos» también de la diócesis de Zhengding –el padre Li Suchuan, de 40 años, y el padre Yang Ermeng, de 35— fueron puestos en libertad por la seguridad pública de la provincia de Hebei. Habían sido detenidos el 7 de noviembre.
En el momento de la detención del obispo «no oficial» de Zhengding, monseñor Julio Jia Zhiguo, la policía anunció que se lo llevaba para ser sometido a una «sesión de estudio»: «así se llaman los repetidos intentos de las autoridades de convencer al obispo de que se adhiera a la Asociación Patriótica», observa la agencia del PIME.
Consagrado obispo en 1980, el prelado –de 71 años– ha vivido casi todo su ministerio episcopal bajo arresto domiciliario y una veintena de años en prisión. En su casa se dedica a atender a cien huérfanos discapacitados. Ésta es por lo menos la novena vez que es arrestado desde enero de 2004.
La diócesis de Zhengding es una de las más vivas de Hebei, la zona de mayor concentración de católicos con aproximadamente un millón y medio de fieles («no oficiales» en fuerte mayoría).