CIUDAD DEL VATICANO/MOSCÚ, martes 30 de marzo de 2010 (ZENIT.org).- Benedicto XVI y el patriarca ortodoxo de Moscú han manifestado su cercanía a las víctimas de los atentados que tuvieron lugar este lunes en la capital rusa.
Este martes, ante un túmulo de flores, velas e iconos, en la estación Lubianka, los moscovitas se congregaron para rezar por las 39 personas fallecidas y por los 70 heridos que cayeron en las dos estaciones, ambas en la línea roja de metro, la más antigua y céntrica.
El Papa ha invitado un telegrama al presidente de la Federación Rusa, Dimitri Medvedev, para expresar «profundo dolor y firme reprobación por los crueles actos de violencia».
El Santo Padre desea hacer llegar su «solidaridad, cercanía espiritual y pésame a las familias de las víctimas».
«Aseguro fervorosas oraciones de sufragio por estas vidas rotas, mientras invoco invoco el celestial consuelo para quienes lloran la trágica pérdida, y envío mi bendición, pensando en particular, en los que han quedado heridos», escribe el Santo Padre.
Por su parte, el patriarca Kirill de Moscú y todas las Rusias urgió este lunes a no responder «a este peligro con miedo o pánico, ni con exasperación».
«Respondamos con la unidad de nuestro pueblo, con nuestra firme voluntad de detener a los terroristas y a los que les apoyan, financian o justifican. El castigo de Dios les llegará y creo, también, la justicia humana» añadió.
El patriarca pidió a los sacerdotes que visiten a las víctimas en los hospitales.