PARÍS, 19 diciembre 2003 (ZENIT.org).- La comunidad cristiana internacional ha lanzado un llamamiento a los jóvenes para que siembren esperanza en el mundo, según se desprende de los mensajes recibidos hasta ahora en la Comunidad ecuménica de Taizé.
Las misivas se han enviado en vísperas XXVI «peregrinación de confianza a través de la tierra», el encuentro europeo que reunirá en Hamburgo –del 29 de diciembre al 2 de enero próximo— a decenas de miles de jóvenes de los cinco continentes convocados por Taizé.
La iniciativa estimula a los jóvenes a ser, en sus lugares de origen, «peregrinos de confianza sobre la tierra», comprometiéndose en sus barrios, ciudades, pueblos y parroquias con todas las generaciones, desde los niños hasta los ancianos.
«Que podáis llevar a los demás, como sobre vosotros mismos, la mirada que Jesús mismo dirige a todo ser humano –dice Juan Pablo II en su mensaje a los jóvenes participantes–, una mirada hecha de ternura, de misericordia y de perdón, una mirada que nos coloca ante todo sobre el camino de la vida y que abre un futuro portador de esperanza».
El Papa también subraya que la misión de los jóvenes «consiste en hacer posible que todos los hombres se conviertan cada día más en un pueblo de hermanos y hermanas, donde cada uno sea reconocido no por lo que tiene sino por lo que es».
El Patriarca ortodoxo Alejo II de Moscú advierte a los jóvenes que «es más importante que nunca compartir la esperanza con los que se tiene al lado, calentar su alma con una palabra de amor y de fe, testimoniar con los actos la verdad eterna del Evangelio».
Y es que en nuestra época es muy fácil «perder los fundamentos interiores de la vida» y «renunciar a la llamada exigente del Evangelio para acomodarse al estilo de los tiempos», constata.
«Al regresar de Hamburgo a vuestros hogares y a los retos de un Nuevo año, “que el Dios de la esperanza os llene de gozo y paz en la fe, de modo que abundéis en esperanza por el poder del Espíritu Santo”», desea al arzobispo de Canterbury –primado de la Iglesia anglicana–, Rowan Williams a los jóvenes.
«La Navidad nos habla de las posibilidades que Dios abre para toda la familia humana, posibilidades de un nuevo modo de vivir. Aquellos que han sido tocados por el don que celebramos en la Navidad buscarán día a día realizar estas posibilidades en sus propias vidas y en las vidas de sus comunidades», sugiere.
«Debéis hacer oír vuestra voz sobre el futuro de nuestro planeta y tomar conciencia de todo lo que podéis hacer para hacer un mundo mejor –invita el secretario general de la ONU, Kofi Annan–. Toda contribución cuenta, por pequeña que sea»
Desde 1978 –la primera cita fue en París–, el encuentro europeo que tiene lugar a finales de cada año puede reunir hasta cien mil jóvenes durante cinco días en una gran ciudad de Europa del Este o del Oeste (Praga, Roma, Budapest, Munich, Viena, París, etc.) en la que son acogidos por las parroquias.
En ocasiones hay encuentros en otros continentes, como los organizados en Madrás (India), Manila (Filipinas), Dayton (EE. UU.) o Johannesburgo (Sudáfrica).
Más información en www.taize.fr.
