YAKARTA, 3 febrero 2002 (ZENIT.org–Fides).- Para las martirizadas islas Molucas se entrevén esperanzas de paz. Del 10 al 12 de febrero, en la ciudad de Malino (en la isla de Célebes), se tendrán negociaciones de paz entre representantes de las facciones cristiana y musulmana de Ambon, capital de las Molucas.
El archipiélago de las Molucas (Indonesia Oriental) quedó envuelto desde enero de 1999 en un conflicto civil entre grupos de cristianos y de musulmanes que causó entre 15.000 y 20.000 víctimas y medio millón de desplazados.
En Malino, ciudad del distrito montañoso de Gowa, 70 km al Sur de Makassar, capital de Célebes Sur, se tuvieron ya, en diciembre del 2001, negociaciones entre líderes religiosos y civiles para poner fin a los conflictos desencadenados en el área de Palu, Célebes Norte, que ocasionaron 50.000 desplazados internos.
Los mediadores del gobierno indonesio, encabezados por el Ministro de Solidaridad Social, Jusuf Kalla, anunciaron la apertura oficial de los coloquios después de haberse encontrado separadamente con cerca de 30 representantes de las facciones en lucha.
El Ministro Kalla se mostró moderadamente optimista sobre la solución del conflicto: «Debemos ser optimistas porque los coloquios preliminares han dado buenos resultados. Ambas partes expresaron disponibilidad a resolver el conflicto y voluntad de alcanzar la paz en las Molucas. Todos están de acuerdo en no considerar el conflicto una guerra entre religiones, sino en concentrar la atención sobre los problemas sociales».
Entre los funcionarios civiles presentes en las negociaciones figurarán también Saleh Latuconsina, Gobernador de las Molucas, y H.Z.B. Palafguna, Gobernador de Célebes Sur.
El Obispo católico de Amboina, monseñor Petrus Canisius Mandagi, que participará en las negociaciones, declaró a Fides: «Junto con nuestros hermanos protestantes, irémos a Malino para tener negociaciones de paz con los musulmanes. Es bueno que se concentren sobre los problemas sociales –la seguridad interna y el regreso de los desplazados-, antes que en discutir sobre el conflicto religioso».
Según monseñor Mandagi, la mediación tiene buenas posibilidades de éxito «porque el gobierno parece que quiere resolver seriamente el conflicto de las Molucas».
Monseñor Mandagi guió una delegación católica-protestante de 15 miembros a Makassar en las negociaciones preliminares. Entre los líderes protestantes se encuentra el presidente del Sínodo de las Iglesias Protestantes de las Molucas, el reverendo Broery Hendrik, y, entre los líderes musulmanes esperados en Malino, figuran Abdullah Wahab Polpoke, Presidente del Consejo de los Ulemas Indonesios (MUI), y Thamrin Ely, jefe del Muslim National Mandate Party (PAN) de Ambon.
Djoko Susilo, exponente del PAN, dijo a Fides que los diálogos de Malino deberían incluir también a los grupos que participaron activamente en la violencia, como el islámico Laskar Jihad y la milicia paramilitar cristiana Maluku Sovereignity Front.
Según los observadores, el proceso de paz tiene posibilidad de éxito, dada la clara voluntad del gobierno de bloquear a los grupos fundamentalistas –minoritarios en el país– que dañan la imagen internacional de Indonesia.
Las dos organizaciones musulmanas indonesias más importantes –la Nahdlatul Ulama y la Mujhammadiyah (con 80 millones de fieles en total)– reafirmaron recientemente su voluntad de trabajar para que Indonesia sea un modelo de país musulmán moderado. Indonesia, con más de 150 millones de musulmanes de entre sus 210 millones de habitantes, es la nación con más musulmanes de todo el mundo.