BELÉN, 14 julio 2003 (ZENIT.org).- Los turistas y los peregrinos extranjeros podrán entrar de nuevo en Belén siguiendo ciertas condiciones, después de que la ciudad natal de Jesús pasara de nuevo bajo el control de las autoridades palestinas, según anunció este sábado un portavoz militar israelí.
Desde hacia meses, los extranjeros que querían entrar en Belén, rodeada por el Ejército de Israel, debían pedir una autorización especial de un comandante israelí del sector.
«A partir de ahora, estos turistas pueden visitar libremente Belén. Pero no pueden utilizar autos privados, deben utilizar un autobús o entrar en la ciudad a pie», añadió el portavoz.
Los extranjeros que disponen de la acreditación de prensa entregada por la Oficina de prensa gubernamental israelí, o de un pasaporte diplomático, así como los que trabajan para organizaciones internacionales como la Cruz Roja pueden también entrar libremente a Belén, añadió.
El Ejército israelí restituyo el control de Belén a las fuerzas de policía palestinas el 3 de julio. La ciudad había sido reocupada en abril de 2002, al igual que todas las ciudades autónomas de Cisjordania.
El 19 de agosto de 2002 el Ejército levantó la ocupación en el marco de un proyecto piloto previsto por Israel para ver si se podía aplicar después a otras ciudades de los territorios palestinos. El Ejército israelí volvió a recoupar Belén el 22 de noviembre tras un atentado suicida contra un autobús en el sur de Jerusalén perpetrado por un kamikaze que, según el Ejército, provenía de Belén. El atentado había provocado 11 muertos y decenas de heridos.