CIUDAD DEL VATICANO, lunes, 11 julio 2005 (ZENIT.org).- El Óbolo de San Pedro no entra en el presupuesto de la Santa Sede, aclaró este lunes el cardenal Sergio Sebastiani, presidente de la Prefectura para los Asuntos Económicos de la Santa Sede (APSA).
«Una cosa es el Óbolo de San Pedro, que son donaciones para la caridad del Papa, y la otra el Balance Consolidado de la Santa Sede», explicó a los periodistas en una rueda de prensa de presentación de este balance, que por primera vez en los últimos tres años no está en números rojos.
«No creemos confusión», aclaró, «esa cantidad no entra en el balance que hoy presentamos. Aunque incluso muchos sacerdotes se confunden», reconoció.
El purpurado también aclaró que el balance económico de la Santa Sede (sus organismos y dicasterios) es totalmente independiente al del Estado de la Ciudad del Vaticano, con sus oficinas, supermercado, museos, etc.
Por otra parte, especificó que la APSA (Administración del Patrimonio de la Santa Sede) no gestiona los recursos, sino que sólo hace contabilidad.
Ante la pregunta de quién se hace cargo de los gastos ocasionados durante la Sede Vacante (abril 2005, con la muerte del Papa, el funeral, el cónclave, la elección del pontífice y el inicio de pontificado), el cardenal respondió que es competencia exclusiva de la Cámara Apostólica y que todavía no se ha hecho un balance.
La Cámara Apostólica, que está presidida por el cardenal camarlengo, en estos momentos el cardenal Eduardo Martínez Somalo, presentará los gastos que se han hecho a la APSA.
