CIUDAD DEL VATICANO, lunes 12 de abril de 2010 (ZENIT.org).- “Un momento de renovación espiritual”: así define el cardenal Tarcisio Bertone, Secretario de Estado vaticano, la visita que el Papa Benedicto XVI realizará a Malta el 17 y el 18 de abril.

En un mensaje difundido con ocasión del viaje papal, el purpurado explica que es Pontífice “está muy ansioso por realizar su visita apostólica a las islas maltesas”; “os saluda a todos en la alegría del Señor Resucitado e invoca sobre vosotros las abundantes bendiciones que brotan de la victoria de Cristo sobre el pecado y sobre la muerte y de su entrada triunfal en la vida”.

En los días de preparación que quedan antes del viaje, escribe el cardenal, “Su santidad os pide que recéis para que su visita sea un momento de renovación espiritual para toda la Iglesia en Malta y en Gozo”.

“Como Pedro fue invitado por el Señor a confirmar a sus hermanos en la fe, así ahora el Sucesor de Pedro viene entre vosotros para reforzaros en vuestro empeño de seguir a Jesucristo”.

Herencia preciosa

El cardenal Bertone subraya también que Malta “ha permanecido fiel a Cristo durante muchos siglos, y ha hecho mucho para defender la fe, tanto en la patria como en el extranjero”

“Podéis estar orgullosos de vuestra herencia cristiana, orgullosos del testimonio de muchas generaciones de católicos malteses que vivieron su fe con devoción ejemplar, y orgullosos del fervor apostólico con el que innumerables hombres y mujeres de vuestras islas se comprometieron en la actividad misionera, llevando la Buena Noticia de Jesucristo a lugares lejanos”, escribe a los malteses.

“El Santo Padre sabe cuán apegados estáis a vuestra herencia, y os invita a profundizar este apego como realidad viviente y verdad siempre importante, aunque en la sociedad actual corre el riesgo de ser atacada, ignorada u olvidada”.

Valores no negociables

Malta, recuerda el Secretario de Estado en su mensaje, reafirma “la necesidad de defender la santidad del matrimonio, la centralidad de la familia para una sociedad sana y la necesidad de proteger la dignidad de la vida humana desde la concepción a la muerte natural”.

“Malta sabe cómo cuidar de sus miembros más débiles y vulnerables de la sociedad, incluso los concebidos”, también porque da gran valor “a la vida familiar”.

La familia, subraya el cardenal, “nos enseña a vivir en solidaridad en cada sector de la vida social y civil”. Como ha afirmado Benedicto XVI en su Mensaje para la Jornada Mundial de la Paz 2008, es además “la primera e insustituible educadora en la paz”.

“Estas son las grandes verdades que Malta puede testimoniar con autoridad y convicción”, añade.

“En el momento en el que el pueblo maltés celebra con particular alegría el 1950° aniversario de la llegada de san Pablo a sus costas, el Santo Padre os confía a todos vosotros a la intercesión de ese gran apóstol y misionero, que proclamó incansablemente la Buena Noticia del Señor crucificado y resucitado a los pueblos del Mediterráneo”, prosigue el mensaje del purpurado al pueblo maltés.

En este Año Sacerdotal, el Papa les exhorta finalmente “a valorar el gran don del sacerdocio y a apoyar y rezar por vuestros sacerdotes, para que puedan crecer en gratitud a Dios y en fidelidad y entusiasmo por el ministerio”.

Por Roberta Sciamplicotti, traducción del italiano por Inma Álvarez