Cardenal de Viena: La visita del Papa a Eslovaquia, llamamiento a Europa

«A no olvidar de dónde venimos, a no perder el alma»

Print Friendly, PDF & Email
Share this Entry

BRATISLAVA, 15 septiembre 2003 (ZENIT.org).- Juan Pablo II con su visita a Eslovaquia –del 11 al 14 de septiembre– ha ofrecido un impulso decisivo a la construcción de una Europa que recupere los valores espirituales que la forjaron, considera el cardenal Christoph Schönborn, arzobispo de Viena.

«Es un gesto muy significativo que el Santo Padre haya realizado sus últimos viajes a Europa central: el número 100 a Croacia, el número 101 a Bosnia-Herzegovina, y ahora, el número 102, a Eslovaquia», explica el purpurado austríaco.

«El centro de Europa, tan herido por las ideologías del siglo XX –las nacionalistas, el comunismo, el nazismo–, está entrando ahora en una nueva realidad, la Europa unida. Y nos preguntamos quién dará vida a esta nueva realidad», aclara en declaraciones a «Radio Vaticano».

«Estamos convencidos de que la fe dará cohesión, fuerza interior, paciencia, apoyo a esta realidad. No hay nadie que esté más convencido de esta necesidad que el Santo Padre», explica.

«De todo esto es testigo con su misma carne: por su origen, por su historia, y ahora, como Vicario de Cristo», aclara.

Por este motivo, según el cardenal, la visita del Papa a Eslovaquia ha sido «un gran llamamiento a Europa: a no olvidar de dónde venimos, a no perder el alma».

«La visita del Santo Padre, que tanto se ha entregado a ese país, a pesar de su debilidad, es un signo fuerte», concluye.

Print Friendly, PDF & Email
Share this Entry

ZENIT Staff

Apoye a ZENIT

Si este artículo le ha gustado puede apoyar a ZENIT con una donación