El pontífice recibió a esta comunidad, que está ligada a la iglesia del mismo nombre, en la que se celebran los sacramentos en alemán para peregrinos y residentes en Roma, con motivo de las celebraciones del sexto centenario de su fundación.
El Santo Padre invitó a sus compatriotas a dar «siempre la precedencia a la vida sacramental», pues su misión consiste en mostrar a las personas a «Jesucristo, que es el Señor de la Iglesia, que desea abitar en sus corazones».
«Si el Señor estará siempre en el centro de vuestra vida», aclaró el Santo Padre, «seréis cada vez más una comunidad apostólica y misionera».