CIUDAD DEL VATICANO, domingo, 7 de marzo de 2010 (ZENIT.org).- A sorpresa, la Santa Sede ha anunciado que Benedicto XVI viajará el próximo mes de noviembre a Santiago de Compostela y a Barcelona. Dos metas «fascinantes», que el Papa ha incluido en su agenda para profundizar en el diálogo entre arte y fe y mostrar las raíces cristianas de Europa, añade el portavoz vaticano.
En el editorial del último número de «Octava Dies», semanario del Centro Televisivo Vaticano, el padre Federico Lombardi S.I., director de la Oficina de Información de la Santa Sede, reconoce que este anuncio casi de última hora, teniendo en cuenta todo lo que significa preparar un viaje de estas características, dejará una huella importante en este pontificado.
«Creíamos que la agenda de los viajes internacionales del Papa para 2010 estuviese ya definida con el acostumbrado numero de cuatro, y de repente, con una sorprendente decisión, Benedicto XVI acoge otras dos invitaciones a España. El numero de viajes – además de Malta, Portugal, Chipre y Gran Bretaña – aumenta a cinco: Mediterráneo y Oriente Medio, Península Ibérica y Europa del norte. No son inmensas distancias, pero sí ambientes diversos. Tendremos oportunidad de escuchar, participar y aprender».
«En particular, las ultimas dos metas españolas son fascinantes –asegura el portavoz–. Barcelona y la iglesia de la Sagrada Familia: el arzobispo cardenal Lluís Martínez Sistach la define un templo ‘de significado artístico, bíblico, teológico, espiritual y catequético, único en el mundo’. Esa síntesis original de arte y fe nacida del genio de Gaudí, dará al Papa una ocasión preciosa para continuar el discurso del dialogo con el arte, propuesto por él con intensidad en el reciente encuentro con los artistas en la Capilla Sixtina».
«Santiago de Compostela, meta del camino de los peregrinos que desde hace siglos llegan hasta allí de tantos países y direcciones diversas, es un lugar donde el tema de las raíces cristianas de Europa demuestra que no es una teoría abstracta, sino experiencia concreta de todo tipo de personas, de las mas diversas proveniencias, que convergen movidas por una espiritualidad común».
Con estas dos etapas en España, concluye el portavoz, «el Papa Benedicto continúa su peregrinación, para hablar de Dios a todo hombre de nuestro tiempo dispuesto a buscar su rostro».
