BARCELONA, 20 octubre 2003 (ZENIT.org).-
Durante el «Primer Simposio Internacional Multicultural de Salud Reproductiva», celebrado este fin de semana en el hotel Meliá de Barcelona y al que acudieron 230 médicos y científicos de todo el mundo, se practicaron, según indica el programa que se puede consultar en www.fundacionmorin.org, 50 abortos en directo.
Los doctores, «números 1 de sus países», según reveló a la agencia Veritas la portavoz de la Fundación Morín (organizadora del evento), tuvieron la oportunidad durante el congreso de «realizar una intervención hands on –es decir, de participar físicamente en una «intervención voluntaria del embarazo»– con los mejores médicos en Salud Reproductiva».
Los abortos se practicaron el viernes 17 de octubre entre las cinco y las siete de la tarde, según explica el programa de la página web, en 30 pacientes embarazadas de 0 a 3 meses (en las clínicas EMECE y GINETEC); 15 de 3 a 6 meses (en la clínica GINEMEDEX) y 5 mujeres más que se encontraban más o menos cerca de cumplir el sexto mes de gestación (clínica TCB y Fundación Morín).
El grupo «Médicos cristianos de Cataluña» (MCC), que encabeza el doctor José María Simón Castellví, interpuso una denuncia la pasada semana en el juzgado de guardia para evitar que se celebrase el simposio, pero éste se llevó adelante. Según el doctor Simón, «no podemos olvidar que el aborto es un delito en España.
Está despenalizado en tres supuestos, pero continúa siendo un delito». Efectivamente, sólo está despenalizado en los supuestos de peligro para la salud física o psíquica de la madre (sin límite de gestación y 12 semanas respectivamente); malformación congénita (hasta 22 semanas) y violación (también 22 semanas).
«Si además se muestran 50 abortos en público, como si no pasase nada, se está cometiendo un delito mayor», prosigue. «Es como si se organizase un congreso de infractores de carretera para explicar todas las técnicas para romper las leyes», añade. Además, cinco de los abortos que se practicaron el viernes estaban rayando la legalidad, al practicarse en mujeres embarazadas de casi seis meses, si es que no la rompieron», explica.
La portavoz de la Fundación, sin embargo, ha explicado a Veritas que «no se han practicado abortos; tan sólo se han puesto en común técnicas científicas», aunque no ha sabido explicar en qué consistían esas técnicas y qué se hizo con las 50 mujeres que acudieron a las clínicas abortistas el pasado viernes.
La portavoz, además, reconoció que no estuvo presente durante las sesiones de «hands on».
Según el doctor Simón, «aunque nosotros quisimos asistir al congreso, no nos lo permitieron, y a muchas personas que sabemos que lo intentaron también les fue denegado el acceso». «Sólo admitían a gente de ellos, ni siquiera a periodistas», denuncia.
La queja del presidente de MCC contrasta con la carta de presentación del simposio de Carlos Morín, presidente de la Fundación que lleva su apellido, en la que se despide diciendo: «Esperando su presencia, cordialmente los invitamos a participar en nuestro primer simposio internacional».
La plataforma ciudadana «E-cristians», radicada en Barcelona, ha denunciado también que, dos semanas antes de la celebración del congreso, en la página web de la Fundación Morín se incluía el nombre de 48 entidades del «tercer sector» (mayoritariamente solidarias y altruistas), y el pasado 16 de octubre la lista se veía reducida a 27.
Entre las asociaciones citadas se encontraba Cáritas Española, una institución católica. Sin embargo, su presidenta Nuria Gispert desmintió el mismo jueves a E-Cristians cualquier relación con el simposio y aseguró que la entidad eclesial «ya no sale en la lista, e incluso la misma Fundación Morín ha enviado una carta a Cáritas pidiendo disculpas por la equivocación».
Respecto a este punto, el doctor Simón ha criticado «que haya habido tantas irregularidades en el congreso, desde el uso del nombre de Cáritas y de otras instituciones hasta decir que el dinero que se recaudase del simposio iría a parar a una guardería para hijos de inmigrantes».
La portavoz de la Fundación, sin embargo, preguntada al respecto por Veritas, ha despachado la acusación de E-cristians respecto a Cáritas con un lacónico «es un tema eclesiástico de esos».
Al margen del caso de Cáritas, según datos de E-Cristians, los organizadores han borrado otros colectivos que constaban en la primera lista, entre los que destacan el Parlamento de Cataluña, la Asociación de Mujeres Periodistas de Cataluña, la Asociación pro Respeto a la Vida, el Grupo de Lesbianas Feministas, la Federación de Mujeres Progresistas, la Casa Argentina y la Asociación de Inmigrantes Ecuatorianos, entre otros. En cambio, siguen apareciendo, por ejemplo, la Dirección general de la Mujer y el Instituto Catalán de la Mujer.
La Fundación Morín se autodefine como «un centro multicultural y referencial para la mujer inmigrante en su atención médica y social» y sitúa, entre los objetivos principales del simposio, el de «dar a conocer sus actividades y aunar esfuerzos en la lucha contra la indiferencia de los derechos de la mujer».
La fundación también justifica su existencia en «un afán altruista mediante acciones benéficas para ayudar a la mujer a integrarse».
El simposio dividió su trabajo en tres programas: científico, con ponencias y mesas redondas sobre salud reproductiva y un curso «hands-on» («manos adentro») con prácticas de aborto; social, con ponencias y talleres sobre salud sexual y reproductiva, y cultural, con cenas «de gala y etiqueta» (según el programa de la organización) para conmemorar los 25 años de la clínica EMECE.
Bajo la presidencia de Carlos Morín, que también es el director del Grupo Barnamedic, y del estadounidense Warren Hern, médico de la clínica BOULDER, participaron, como profesores del congreso, una larga lista de personas procedentes de varios países del mundo, entre los que destacan España, Estados Unidos, Francia y Holanda.
Por parte de los conferenciantes destacan, entre otros, la ex diputada Cristina Almeida, también abogada, que se ha manifestado partidaria del aborto libre en numerosas ocasiones; el secretario general de Inmigración de la Generalitat de Cataluña, Salvador Obiols (quien, al final, no participó); la jefa de la División de Población de Marruecos, Tyane Mustapha; la responsable de la Secretaría de la Mujer del Partido de los Socialistas de Cataluña (PSC), Lourdes Muñoz; la representante del grupo «Católicas por el Derecho a Decidir», Paloma Alonso, y la presidenta de la asociación francesa por el Desarrollo de Métodos de Contracepción y Urgencia, Elisabeth Aubény.
