MAPUTO, 29 octubre 2003 (ZENIT.org).- Un llamamiento a la reflexión sobre la realidad del país y a la coherencia con la propia fe ante las urnas han lanzado los obispos de Mozambique a los fieles y hombres y mujeres de buena voluntad con vistas a la próxima cita electoral.
El país africano celebrará las elecciones administrativas el próximo 19 de noviembre y las políticas en noviembre de 2004.
«Pedimos a todos los mozambiqueños que reflexionen sobre la realidad sociopolítica y económica en la que vivimos y asuman la labor de elegir, por medio del voto, a los candidatos capaces de dar solución a los problemas que afectan a la sociedad mozambiqueña y mejoren sus condiciones de vida», exhortan los prelados.
En su Carta Pastoral «Justicia y transparencia en las elecciones», difundida por Fides, los obispos no olvidan los progresos verificados en el país, que salió en 1992 de una larga guerra civil.
Sin embargo, existen aún problemas que afectan a la vida política, empezando por las intimidaciones que se suceden durante la campaña electoral.
De ahí que adviertan de la urgencia de «crear y aplicar mecanismos concretos y correctos para que estas anomalías sean superadas a fin de garantizar el ejercicio de los derechos democráticos».
Otros elementos configuran el perfil actual del país, el que existe corrupción o diferencias entre ricos y pobres: «una minoría continua enriqueciéndose de modo no claro mientras una gran mayoría de pobres cada vez se empobrecen más», teniendo en cuenta que «vivimos en un país que podría ser rico», denuncian los obispos.
Junto con la educación, la agricultura, los transportes y las comunicaciones, la salud destaca entre las preocupaciones de los obispos de Mozambique, en especial por «la difusión del Sida».
Todo ello explica la importancia de la consulta electoral y lleva a los obispos a exhortar a los mozambiqueños de buena voluntad y en particular a los creyentes a que hagan del acto electoral «una manifestación política de su fe y de su compromiso con el bien común del país».
«Pedimos a todos los creyentes que recen para que las próximas elecciones administrativas sean una verdadera fiesta de cultura, de democracia y de paz en nuestro país», concluyen.
