El Meeting de Rimin para la Amistad entre los Pueblos concluyó el sábado pasado. Allí estuvo el cardenal Adrianus Johannes Simonis, arzobispo emérito de Utrecht en Holanda que hizo una cita fija con el evento, este año por la 24° vez. A ZENIT le indicó que considera los movimientos como una gracia de Dios para nuestro tiempo, que el Meeting de Rimini trae nutrimiento cultural a los miles de jóvenes que allí participan. Lamentó la situación de la fe en Holanda, aunque indicó que con la llegada del papa Francisco se ha detenido la hemorragia de personas que se iban de la Iglesia católica.
El Meeting se realiza en los amplios hangares de la feria de la ciudad de Rimini, con stands, muestras, conferencias, debates, e incluso actividades lúdicas y deportivas. Es organizada por el movimiento ‘Comunione e Liberazione’, busca una cultura del encuentro con diversas realidades. Cada año por allí pasan hasta más de un millón de personas.
Eminencia, ¿cuál es su balance sobre el Meeting de Rimini para la Amistar entre los pueblos?
–Card. Simonis: He venido aquí durante 24 años. Un obispo no se identifica con los movimientos, pero estos son una bendición para la Iglesia y para cada país. En particular Comunión y Liberación, porque tiene como punto central la encarnación de Dios en Cristo. Dios quiere encarnarse también en nosotros, y también en la vida pública, en la vida política y en la vida cultural.
¿Y para los jóvenes?
–Card. Simonis: En este meeting se encuentra mucho de la cultura italiana, y hay nutrición para la cultura de los jóvenes. Ud ha visto que son tantos y tantos son los jóvenes que vienen, son idealistas y nutridos con un verdadero idealismo y eso es una bendición.
Ud. ha hablado de los movimientos. El último sínodo sobre la nueva evangelización también
–Card. Simonis: Porque son una gracia de Dios para este tiempo, después del Concilio, como comunión y Liberación, Focolares, Neocatecumenales y todos los otros.
¿Cual es la situación de la fe en Holanda?
He visto que el interés de la gente fue bajando, ahora la situación de la fe en Holanda es muy triste, muchos han abandonado la fe, dicen que hay fe pero no veo mucho de esto, espero y rezo por nuestro país para que reflorezca.
¿O sea es una situación de dificultad?
–Card. Simonis: Yo vivo en la comunidad de los focolarinos, veo que ellos prueban buscar jóvenes y no logran, estos están muy ocupados por la escuela, los clubes, internet y muchas veces tan lejos de la Iglesia y de la fe que se preguntan ¿de qué se habla? Indiferencia, materialismo, hedonismo, es una sociedad pagana, es muy triste.
¿El papa Francisco puede cambiar en algo la situación?
–Card. Simonis: Espero que este papa pueda hacer mucho por la credibilidad de la fe y de la Iglesia, también por nosotros está siendo recibido con alegría. He sentido decir a un párroco que desde que ha llegado el papa Francisco se ha detenido el fenómeno de gente que abandonaba la Iglesia.