BAGDAD, 3 de noviembre de 2005 (ZENIT.org).- El futuro de los cristianos en Irak será uno de los argumentos centrales del Sínodo especial que la Iglesia caldea celebrará en el Vaticano del 18 al 12 de noviembre.
La fecha del encuentro fue confirmada este jueves por monseñor Andraos Abouna, obispo auxiliar del patriarca caldeo en Bagdad, Su Beatitud Emmanuel II Delly, a la agencia AsiaNews.
El encuentro, entre los obispos caldeos procedentes de Irak y de la diáspora, se celebrará a puertas cerradas. Los obispos se reúnen en general una vez al año, pero la dramática situación les ha impuesto la convocatoria de un nuevo Sínodo, después del celebrado en Irak a inicios de este año.
El padre Philip Najim, quien participa en su organización, ha revelado que no sólo se afrontarán las cuestiones iraquíes, sino también la reforma de la liturgia caldea.
Por su parte, monseñor Louis Sako, obispo caldeo de Kirkuk, ha explicado a AsiaNews que el Sínodo debe establecer la «línea directiva» que la Iglesia debe presentar «con valentía» al gobierno.
Asimismo, añade el prelado, es necesario estudiar el problema de la emigración y la manera en que hay que afrontar el «creciente proselitismo de las Iglesias evangélicas en Irak».
Sobre esta cuestión el mismo patriarca Emmanuel II Delly ha expresado su preocupación, explicando que la Iglesia caldea siempre ha mantenido buenas relaciones con los grupos evangélicos en Irak.
Estos «nuevos evangélicos», aclara, llegados tras la guerra, están más interesados en recoger dinero de los ricos bienhechores extranjeros que de difundir el Evangelio.
Según monseñor Sako, «el problema crucial hoy es la situación de los cristianos de Irak, sobre todo bajo la nueva Constitución, que hace imposible la conversión del Islam, y que unifica de manera poco clara a caldeos y asirios».
«Nuestra Iglesia no tiene una visión para el futuro, ni sobre el futuro político del país, ni a nivel pastoral. Todo se improvisa, se vive día a día», reconoce.
El referéndum ha sido un «paso importante» para la democracia, aclara, pero esta Constitución es «demasiado confesional» y la comunidad cristiana «no está satisfecha», denuncia.
Los cristianos caldeos (fieles a Roma) en Irak son 550.000, mientras que otros 150.000 forman parte de las ocho diócesis esparcidas por todo el mundo.
ÚLTIMAS NOTICIAS
Nov 03, 2005 00:00