PUERTO IGUAZÚ, 11 julio 2003 (ZENIT.org–Aica).- Ante los reiterados casos de desnutrición infantil y el «abandono por parte del Estado» en que se encuentra la provincia, la comisión Cáritas-Pastoral Social de la diócesis de Puerto Iguazú ha pedido que se declare a Misiones en situación de «catástrofe social»
Asimismo, solicita que se asignen los recursos necesarios para «el abastecimiento de alimentos que garanticen el derecho fundamental a la vida».
En una carta abierta a la sociedad, difundida tras la muerte de un bebé de cinco meses víctima de desnutrición, la organización advirtió que «son muchos los niños que han muerto y siguen muriendo mientras el Estado sigue ausente».
Denunciando la distancia del Estado «de las soluciones concretas», Cáritas-Pastoral Social cuestiona la presencia del mismo «a la hora de “judicializar” la pobreza».
«Se procesa a las madres de esos niños por “abandono” de persona, cuando el Estado tiene la obligación de hacer cumplir los derechos constitucionales al trabajo, la alimentación, la salud, la vivienda y la educación».
«No queremos esta realidad ni podemos esperar más –se lee en la misiva–. Tenemos que cortar el camino a la muerte».
«Exigimos que se asuma la realidad y se declare a la provincia en estado de catástrofe social a fin de que se asignen los recursos necesarios para el abastecimiento de alimentos que garanticen el derecho fundamental a la vida», concluye.