«En estos momentos tenemos buenísimas relaciones con el Vaticano y ningún problema», declaró Deiss.

«En el Vaticano estamos representados por un embajador en misión especial, y el Consejo Federal está pensando en cambiar pronto esta situación, acreditando ante el Vaticano un embajador extraordinario y plenipotenciario», añadió.

La visita del Papa, que tendrá lugar este fin de semana podría ser «la ocasión para hacerlo público», añadió.

El Vaticano mantiene relaciones diplomáticas con Suiza desde 1920. Por respeto a las demás confesiones, no había enviado a Roma ningún representante diplomática hasta 1991. Desde entonces existe un «embajador en misión especial» con sede en Berna.