MANAGUA, domingo 8 de mayo de 2011 (ZENIT.org).- El 3 de mayo la archidiócesis de Managua dio a conocer el proyecto «Tu Palabra es Vida», que propone como eje transversal el estudio dinámico y en conjunto de la Palabra de Dios.
El lanzamiento del proyecto se realizó en la catedral metropolitana de Managua. El arzobispo de Managua Leopoldo José Brenes, el obispo auxiliar Silvio José Báez –quien dirigió la celebración–, el clero de la archidiócesis de Managua, y laicos delegados de las parroquias, participaron en una liturgia de la Palabra en la cual se dio a conocer esta nueva animación pastoral centrada en la Palabra de Dios.
Monseñor Báez afirmó que este proyecto «es un intento de la archidiócesis de Managua por revitalizar, alimentar, nutrir, renovar toda la vida y la misión de la archidiócesis con la Palabra de Dios, es una invitación para que cada parroquia, cada movimiento, asociación, grupo tenga un contacto vivo con las Sagradas Escrituras».
«No se trata –añadió– de crear nuevos grupos en la parroquia, ni de crear nuevas actividades, sino de que cada movimiento o grupo estudie la biblia según un programa que le vamos a ir facilitando, sobre todo estudiando capítulos completos de la biblia que son importantes, esto debería ayudar a cada grupo a fortalecer su identidad, a renovar su propia espiritualidad y su misión en la Iglesia».
El proyecto pretende «que todos nos alimentemos de la misma Palabra de Dios y que hagamos un camino de revitalización Bíblica –afirmó el prelado-. Que desde nuestra propia vocación, nuestro grupo o parroquia hayamos estudiado, leído, meditado y orado y hecho vida algunos capítulos importantes de la biblia».
«Es un modo de hacer que la Palabra de Dios nos renueve en este año de encuentro con Cristo con la Palabra».
El proyecto que nace este primer año de preparación al primer centenario del nacimiento de la Provincia Eclesiástica de Nicaragua tiene vocación de continuidad.
La idea –explicó el obispo auxiliar de Managua- es generar un proceso a largo plazo en qle ue se pueda capacitar a un gran número de laicos en sagrada escritura. Estos serían los animadores bíblicos en los distintos sectores pastorales de la archdiócesis.
Con el tiempo «una idea que puede ser un sueño», afirmó el prelado, «esperamos que el Señor lo concretice en realidad», es de crear un instituto bíblico de formación para laicos a largo plazo, pero tenemos que ir poniendo las bases desde ahora. Lo que queremos es una Iglesia local en la archidiócesis de Managua que viva continuamente de la fuente de la Palabra de Dios.
Este proyecto será coordinado por la vicaría de pastoral de la archidiócesis de Managua que distribuirá folletos didácticos, fascículos, y artículos, entre otros.
Monseñor Miguel Mantica, vicario episcopal de pastoral aseguró que «muchas veces en nuestros grupos o movimientos hemos pensado en cursos bíblicos, círculos de reflexión bíblica, leer la biblia en nuestros grupos, pero no se entendía la pastoral a la manera de ahora, que es de hacer una animación bíblica de toda la pastoral. La pastoral bíblica no es una pastoral más, sino que es un trabajo pastoral para animar con la biblia todas las pastorales, los movimientos, los grupos y la parroquia misma. Para esto el proyecto quiere ir formando un grupo de animadores bíblicos en la archidiócesis que vayan extendiendo esta nueva manera de ver la pastoral a lo largo y ancho de la archidiócesis de Managua».
El arzobispo de Managua compartió con los fieles la importancia de esta animación bíblica que comienza con el lanzamiento de este proyecto.
«Esto es un proyecto del Espíritu, como parte de renovar nuestra vida, renovar nuestras acciones pastorales. Recuerden que este proyecto no es un movimiento más que queremos promover dentro de la archidiócesis. Este proyecto es más que eso, es ese espíritu de animación bíblica. El santo padre Benedicto XVI ha venido impulsando esta animación tanto misionera como bíblica. Por eso no hay duda que este proyecto en nuestra archidiócesis es para todos nosotros un momento de fortaleza en nuestra vida espiritual».
Invitó a los asistentes a transmitir la Palabra de Dios en todos los ámbitos en los que actúen. «Hemos visto que en nuestros movimientos o grupos la Palabra de Dios ha estado ausente. Y recordemos que la Palabra de Dios tiene que ser el centro de nuestra vida. Como dice el Papa la Palabra tiene que ser la fuente y la cumbre de la misión de cada uno de nosotros. El Señor no ha elegido a nosotros para darnos ese impulso y que podamos realizar la animación bíblica en toda nuestra archidiócesis, que este impulso y animación sea la parte transversal de todas nuestras actividades», concluyó.